• Hasta julio se culminaron 15 diques que representan el 42.8% del total. Los 20 restantes se entregarán hasta fines de año.
Las obras de las soluciones integrales para mitigar los efectos del fenómeno de El Niño continúan en Trujillo. A la fecha se culminaron 15 de los 35 diques que conforman el Paquete 2, diques de la quebrada San Idelfonso, y se prevé que los restantes serán construidos en su totalidad hasta fines del 2023.
Según la última comunicación de la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios (ARCC), los contratistas realizan jornadas de 10 horas diarias con 32 equipos distribuidos en tres frentes que trabajan de manera paralela para acelerar la edificación de las barreras de roca.
El alcalde de El Porvenir, Juan Carranza, en su última visita al proyecto en el mes de julio constató los avances e indicó que se espera que todos los diques se culminen a fines de año. Carranza Ventura remarcó que las obras de soluciones definitivas en la quebrada San Idelfonso beneficiarán a más de 3 mil familias de los sectores Río Seco, Alto Trujillo, Túpac Amaru y Víctor Raúl Haya de la Torre.
¿Cómo funcionan los diques de las quebradas?
La Mg. Ing. Civil Yrmina Salaverria, coordinadora académica de Ingeniería Civil e Ingeniería Ambiental de la Universidad Continental, explicó que los diques son estructuras flexibles conformadas por bloques de roca que se traban entre sí, tienen un promedio 5 metros de altura y su longitud depende de la distancia entre ambos márgenes de la quebrada.
Estas estructuras hidráulicas tienen una doble función. Por un lado, actúan como elementos de retención de sedimentos sólidos de diferentes tamaños, tales como guijarros, bolones de piedra, gravas y arena. Asimismo, dada su permeabilidad, funcionan como filtros atrapando en su interior un porcentaje de dichos elementos de arrastre, dejando pasar agua con partículas de menor tamaño.
“Si bien la retención de sedimentos es importante, el rol principal de estos diques es corregir el flujo de la quebrada, ya que con la acumulación de sedimentos aguas arriba, se forman una especie de “terrazas de compensación” que permiten reducir la velocidad del caudal y su energía”, menciona la Mg. Ing. Salaverria.
Cabe destacar que la construcción de estas barreras es uno de los cinco componentes del proyecto de soluciones integrales de las quebradas San Carlos y San Idelfonso, el cual también contempla: construcción de túnel, canalización del agua, intervención en el río Moche y paisajismo.
