Por: Dr. Jorge Apolitano Rodríguez (Presidente de ARDOC)
Hoy es el día “D” para los electores. Más de 25 millones peruanos irán hoy a las urnas para elegir el presidente de Perú. Entre los dos candidatos Pedro Castillo que lidera Perú Libre y Keiko Fujimori de Fuerza Popular.
Mi invocación a los electores peruanos y liberteños un voto reflexivo y pensante. No queremos lamentaciones después de haberlos elegidos como presidente de la República, ahora el mundo digital del internet y los medios de comunicación social, fue fácil leer sus hojas de vida, propuestas y trayectoria profesional y académica de los dos candidatos que postulan a dichos cargos.
Queremos un jefe de Estado dinámico (a), concertador (a), humilde y sobre todo muy transparente. Debemos decir no a los candidatos soberbios, arrogantes que postulan manchados, con partidos vientres de alquiler, o tienen procesos judiciales por delitos corrupción contra el estado y la administración pública y que su único fin es llenarse los bolsillos con los recursos del estado.
No quiero que la población se lamente cuando elijan a sus autoridades por un quinquenio, para esto le damos algunas pautas para que el elector no se equivoque y seleccionen al mejor candidato. Por eso es importante haber leído sus hojas de vida y antecedentes de los candidatos que postulan a la Presidencia de la República.
El presidente de un país, debe ser una personalidad democrática respetoso del estado de derecho, que mantiene un estrecho contacto con la ciudadanía, evitando actitudes clientelares o paternalistas, que no teme discrepar y que actúa como un educador, enseñando con el ejemplo.
Debe de rodearse de técnicos capaces y motivados que no son necesariamente sean sus amigos, ni sus seguidores. Debe preferir un buen funcionario competente y capaz, que conozca gestión pública con valores, incluso de criticarlo. Estos casos de nombramientos indebidos vemos en las municipalidades y gobiernos regionales, gente incapaz y oportunistas.
Un jefe de Estado a parte de ser un estadista, debe saber escuchar a la ciudadanía. Las características de un buen presidente deben tener visión de futuro, contar excelentes habilidades de comunicación para persuadir a las autoridades subnacionales y alcaldes a gestionar recursos para sus comunas y no solamente se dediquen a pedir. Debe ser innovador.
Todos sabemos que los recursos del estado son escasos, más aún con esta crisis sanitaria de la pandemia COVID-19, debe ver una buena administración financiera y económica. Que los ciudadanos y las empresas paguen sus impuestos y tributos y sobre todo, buscar una política agresiva de búsqueda de recursos externos basada en la elaboración de proyectos. Hay que ser concertador y negociador con las autoridades subnacionales, alcaldes y con el congreso, buscando siempre la gobernabilidad.
Un jefe de Estado debe saber trabajar y colaborar con la oposición tratando de llegar a un consenso amplio en todos los proyectos. Estas son algunas recomendaciones para un buen presidente que en verdad quiera el desarrollo y progreso del país, no llegar a la presidencia para enriquecerse y trabajar solamente para él, su grupo y amigos. Tiene que ser ejemplo y siempre buscando el bien común de la sociedad y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
En este quinquenio de gobierno 2021-2026 es importante y clave para el país, porque estamos atravesando crisis económica, hay más de 3 millones pobres a consecuencia de esta pandemia. Muchos peruanos votaran con criterio, que se respete la democracia y el estado de derecho. Por estas razones, pido un voto responsable y reflexivo. Que Dios me escuche, por un Perú mejor.
