Se esperaba que la tormenta tropical Melissa se fortaleciera hasta convertirse en huracán el lunes. Foto cortesía de NOAA
21 de octubre (UPI) — La tormenta tropical Melissa se movía lentamente por el Caribe el miércoles, lo que significa que se esperaba que partes de Haití, República Dominicana y Jamaica sufrieran grandes inundaciones durante la semana, dijo el Centro Nacional de Huracanes.
Melissa estaba a unas 305 millas al sur-suroeste de Puerto Príncipe, Haití, y a 335 millas al sureste de Kingston, Jamaica, dijo el NHC en su actualización de las 8 a.m. hora del Este. La tormenta se había mantenido prácticamente estacionaria desde la actualización anterior de la agencia tres horas antes.
La tormenta tenía vientos máximos sostenidos de 50 mph y se movía hacia el oeste-noroeste a 2 mph.
Estaba vigente una alerta de huracán para la península suroeste de Haití, desde la frontera con la República Dominicana hasta Puerto Príncipe. Estaba vigente una alerta de tormenta tropical para Jamaica. Aquellos en otras partes de Haití, República Dominicana y Cuba deberían monitorear el progreso de Melissa, dijo el NHC.
Se espera una disminución de la velocidad y un giro gradual hacia el noroeste y el norte en los próximos días, según el NHC, que dijo que espera que Melissa se acerque a Jamaica y el suroeste de Haití a finales de esta semana.
El NHC predice que Melissa se fortalecerá hasta convertirse en huracán el viernes por la tarde.
Haití y República Dominicana pueden esperar entre 5 y 10 pulgadas de lluvia hasta el viernes, dijo el NHC. Es posible que llueva más intensamente después del viernes, pero los meteorólogos no están seguros de los pronósticos debido a la incertidumbre sobre la velocidad y dirección de Melissa. Es probable que se produzcan importantes inundaciones y deslizamientos de tierra.
En Aruba, Puerto Rico y Jamaica, se esperan de 1 a 3 pulgadas de lluvia hasta el viernes. Es posible que se produzcan inundaciones repentinas y urbanas en todo Puerto Rico al menos hasta el viernes.
Melissa es la decimotercera tormenta con nombre de la temporada y la primera en el Caribe. Esta temporada ha habido pocas tormentas que han calentado el Mar Caribe. Ahora, el agua cálida es combustible para tormentas más fuertes y peligrosas.
