El Jurado Electoral Especial de Lima Centro excluyó este viernes 15 de enero, de los comicios generales del 11 de abril del 2021 al expresidente Martín Vizcarra, quien aspira al cargo de Congresista de la República por el partido Somos Perú, por haber omitido información sobre sus bienes en la declaración jurada para inscribir su candidatura.
El ente electoral, «existen inconsistencias en la información» que brindó el exmandatario, relativa a sus ingresos, bienes y rentas, un incumplimiento que, según la norma, determina la exclusión del candidato de la carrera electoral para los comicios generales que se celebrarán el próximo domingo 11 de abril del 2021.
La resolución, que se dio a raíz de un pedido de la excongresista fujimorista Yeni Vilcatoma, acusa al expresidente de no haber declarado el 30% de sus acciones en la empresa Agrotécnica Estuquiña, algo que sí constaba en la declaración jurada que presentó en su condición de presidente de la República.
Al tratarse de una decisión de primera instancia, la formación política tiene un margen de tres días para apelar la resolución ante el pleno del Jurado Nacional de Elecciones (JNE).
Martín Vizcarra, lidera la lista al Congreso de Somos Perú en el distrito electoral de Lima Metropolitana, confirmó vía Twitter que su partido recurrirá al JNE y confió en seguir en la carrera electoral.
Las elecciones se celebrarán el próximo domingo 11 de abril, cinco meses después de que el Congreso destituyera a Vizcarra, acusado de «incapacidad moral permanente» por las sospechas no probadas de que recibió sobornos cuando era gobernador de Moquegua (2011-2014), algo por lo que la Fiscalía lo investiga por actos de corrupción.
Los congresistas permitieron así que el opositor Manuel Merino, entonces presidente del parlamento, asumiese interinamente la Presidencia e instaurase un gobierno de transición de corte conservador.
Ese acto desató una ola de protestas ciudadanas, reprimidas con una brutal actuación policial que se cobró la vida a dos jóvenes y dejó unos 200 heridos, lo que retiró a Merino la ya escasa legitimidad social que tenía y terminó forzando su renuncia.
