Los vídeos de entrenadores personales entrenando a jugadores de fútbol son cada vez más comunes en las redes sociales.
Ryan Hopper es uno de esos entrenadores, y el capitán del Manchester United, Bruno Fernandes, y su compañero Diogo Dalot son entrenadores que han trabajado con él.
Hopper también entrenó al jugador del Manchester United Marcus Rashford (ahora cedido en el Barcelona), a la dos veces ganadora de la Copa de Europa Ella Toone y a una gran cantidad de jugadores ganadores de campeonatos.
Es uno de las docenas de entrenadores personales del Reino Unido que han hecho carrera entrenando a futbolistas de élite.
El delantero del Everton Jack Grealish, el delantero del Chelsea Cole Palmer y el delantero del Aston Villa Ollie Watkins son otros tres jugadores de alto perfil que han sido entrenados fuera del club.
Pero ¿por qué los jugadores sienten la necesidad de contratar a alguien como Hopper cuando tienen acceso a las mejores instalaciones de entrenamiento?
“En un club como el Manchester United, su entrenamiento está diseñado para conseguir los tres puntos el sábado”, le dijo a BBC Sport.
“Hay grandes entrenadores y si no fueran buenos en su trabajo no estarían trabajando en un club de fútbol.
“Sin embargo, en un entorno de grupo, es posible que tengas cinco jugadores detrás de ti; si necesitas ocuparte de algún detalle, evitas que los otros cinco lo repitan. Cuando es privado, realmente puedes entrar en los detalles.
“Con mi ayuda, los jugadores pueden querer trabajar en ciertos aspectos de su juego con los que no se sienten cómodos frente al cuerpo técnico y la dirección del club”.
