Un tema recurrente en el Celtic esta temporada ha sido la insatisfacción de Rodgers con su negocio de fichajes y la falta de calidad en el club.
A menudo le preguntan al respecto y señala que, además de la larga ausencia por lesión de Jota, la venta de Kyogo Furuhashi en enero pasado y de Nicolas Kuhn este verano también han reducido el número de goles del equipo.
Sebastian Tounekti y Michel-Ange Balikwisha llegaron para reforzar las opciones de ataque de Rodgers después de ser eliminado de la ronda de clasificación de la Liga de Campeones por el campeón kazajo Kailat Almaty, mientras que Kelechi Iheanacho se unió libre después de que se cerró la ventana.
Cuando la ofensiva volvió a fallar, Rodgers pareció crítico con la fortaleza del equipo.
“Creo que el desafío de este verano, ahora que lo afrontamos, es que hemos perdido mucha potencia de fuego y el equipo ha perdido muchos goles”, añadió.
“No puedes ir a una carrera y coger las llaves de un Honda Civic y decir: ‘Quiero que lo conduzcas como un Ferrari’. Eso no va a pasar”.
Insiste en que debe encontrar una “solución” al problema de los goles, ya sea mediante cambios de personal o de formación.
“Tengo que encontrar una solución antes de que las cosas cambien”, dijo Rogers.
“Porque, como dije, los goles, el ritmo, todo proviene del equipo y necesitamos encontrar la manera de mejorar.
“Tuvimos oportunidades de hacer lo que necesitábamos hacer. Pero no sucedió, así que ahora estamos buscando formas de hacerlo, ya sea un 4-3-3, un 3-4-3, un 3-5-2. Estamos tratando de observar todas estas diferentes permutaciones dentro del equipo”.
