Cuando pensamos en filosofía, los nombres que nos vienen a la mente a menudo son Platón, Nietzsche o Kant, figuras que han dado forma a siglos de pensamiento. Pero ¿qué pasa con las mujeres que desafiaron esas mismas ideas, las ampliaron o redefinieron lo que significa pensar profundamente sobre la existencia, la moralidad y la sociedad?
Durante siglos, las filósofas han sido descartadas, silenciadas u olvidadas. Sus obras se vieron ensombrecidas por un sistema patriarcal que rara vez otorgaba autoridad intelectual a las mujeres. Sin embargo, a pesar de estos obstáculos, un puñado de mujeres valientes y brillantes no sólo se han unido a la conversación filosófica, sino que la han remodelado.
Desde cuestiones de moralidad y libertad hasta cuestiones de conciencia, feminismo y derechos humanos, estos pensadores se negaron a aceptar los límites que se les imponían. Sus ideas son tan relevantes hoy como siempre, especialmente en un mundo que todavía cuestiona la igualdad, la justicia y la autocomprensión.
5 mujeres filósofas y pensadoras que todo el mundo debería leer
1. Simone de Beauvoir – segundo sexo
Simone de Beauvoirs segundo sexo (1949) es uno de los textos filosóficos más influyentes del siglo XX. Con penetrante claridad, examina cómo históricamente las mujeres han sido consideradas “otras”, definidas no por sus personalidades sino por sus relaciones con los hombres.
La famosa línea de Beauvoir, “Una no nace, sino que se hace mujer” captura su argumento central: que la feminidad no es el destino sino una construcción social moldeada por la cultura, el poder y las expectativas.
Combinó existencialismo, feminismo y crítica social, sentando las bases para el feminismo de la segunda ola e influyendo en las generaciones de pensadores venideros.
Por qué leerlo: Porque entender el género hoy comienza con entender la pregunta de De Beauvoir: ¿qué significa ser libre en un mundo que te define?
2. Hannah Arendt- condición humana
Las obras de Hannah Arendt analizan las crisis políticas y morales de la era moderna. Después de escapar de la Alemania nazi, Arendt convirtió sus observaciones sobre el totalitarismo en una profunda reflexión sobre el poder, el mal y la acción humana.
En condición humana (1958), distinguió entre labor, trabajo y acción, los tres pilares de la actividad humana que constituyen la sociedad. También advierte sobre los peligros de la irreflexión, famosamente explorada Eichmann en Jerusalén A través de su concepto de “la anormalidad del mal”.
Las ideas de Arendt nos desafían a pensar (pensar realmente) en la responsabilidad, la conciencia y los sistemas en los que participamos.
Por qué leerlo: Porque muestra que el mal no siempre proviene de un villano, sino que puede provenir de gente común y corriente que se detiene a cuestionar.
3. María Wollstonecraft – La verdad de los derechos de las mujeres.
Mucho antes de que “feminismo” fuera siquiera una palabra, Mary Wollstonecraft exigía igualdad. En su revolucionaria obra de 1792, La verdad de los derechos de las mujeres.Sostuvo que las mujeres no eran intrínsecamente inferiores a los hombres, sino que lo hacían por falta de educación y oportunidades.
Su argumento era simple pero radical: dale a las mujeres acceso a las mismas herramientas intelectuales que a los hombres y demostrarán ser igual de capaces.
Aunque escritas en el siglo XVIII, sus ideas son sorprendentemente modernas: desafían los estereotipos, cuestionan la dinámica del matrimonio y promueven la libertad racional.
Por qué leerlo: Porque nos recuerda que el verdadero empoderamiento comienza con la libertad de pensamiento.
4. Iris Murdoch – La soberanía del bien
Iris Murdoch, filósofa y novelista, integra la filosofía moral con la literatura, explorando cómo el amor, la bondad y la imaginación influyen en el comportamiento humano. En La soberanía del bien (1970), critica la filosofía egocéntrica de su tiempo y aboga por la atención moral: ver el mundo más allá de nuestra propia voluntad.
El concepto de “altruismo” de Murdoch anima a los lectores a salir de sus egos y ver la bondad como algo independiente del beneficio personal. Sus ideas cierran la brecha entre la filosofía y el arte, convirtiéndolo en uno de los pocos pensadores que habla tanto al corazón como al intelecto.
Por qué leerlo: Porque define la bondad no como una regla, sino como una forma de ver el mundo con verdad.
5. Ángela Davis Mujeres, raza y clase
La filósofa, activista y académica Angela Davis es un ejemplo vivo de filosofía en acción. Su clásico de 1981 Mujeres, raza y clase Revela cómo se cruzan el feminismo, el racismo y la opresión de clases.
Davis desmantela la noción de una lucha feminista única y universal y muestra cómo las experiencias de las mujeres (especialmente las negras y de clase trabajadora) han sido marginadas dentro del movimiento dominante.
A partir del marxismo, la teoría crítica y la experiencia vivida, Davis cierra la brecha entre el activismo y la academia, instando a los lectores a confrontar verdades incómodas sobre la justicia y la igualdad.
Por qué leerlo: Porque enseña que la liberación no tiene sentido si no es inclusiva.
pensamiento final
Desde los salones de Europa hasta las aulas y las protestas del mundo moderno, estas mujeres demuestran que la filosofía no se limita a las torres de marfil: está presente en todas las cuestiones de justicia, moralidad y existencia.
Leerlos no es sólo un ejercicio intelectual; Es un acto de recuperar la sabiduría olvidada. Cada uno de estos pensadores nos recuerda que el pensamiento, guiado por el coraje y la compasión, puede cambiar el mundo.
Porque leerlos no se trata sólo de comprender la filosofía: se trata de comprender a la humanidad.













