Hasta la fecha se ha registrado 18 muertes, seis de ellas atribuidas a agentes del Estado chileno. Ciudadanos demandan la desmilitarización y el gobierno decreta el quinto día del toque de queda. Anuncios y pedido de perdón del presidente de la República resultaron insuficientes. Ahora el pueblo chileno exige la renuncia del presidente de la República, Sebastián Piñera.
En medio de los gases lacrimógenos, un cartel destaca con esta breve palabra en las manos de una universitaria. Si hasta hace una semana la protesta iniciada en Chile apuntaba fundamentalmente a la atención de las demandas sociales, hoy los manifestantes también le reclaman a Sebastián Piñera, por las muertes ocurridas a manos de los agentes del estado.
“Piñera dictador”. “Piñera asesino, vergüenza nacional”. “No más muertes, basta de represión”. Son frases frecuentes en las banderolas y carteles con témpera que se mostraron ayer en una movilización de mayor convocatoria en la céntrica Plaza Italia, al día siguiente del mensaje y el pedido de perdón del presidente de Chile.
Y hubo otra frase, acaso más frecuente en los carteles y en los gritos de los chilenos: “¡Renuncia Piñera!”. Al día de ayer, por la mañana, el mismo gobierno dio el reporte oficial de 18 muertos, desde que se iniciaron las protestas. Doce habrían sido en el contexto de los saqueos e incendios.
